Vladimir Svoskias nació en las faldas de los montes del Parque Nacional de Risnjak , en una pequeña aldea que no aparece en los mapas llamada "Hrašce", dentro del condado de Požeško-slavonska. Su carrera militar fue nula sin haber podido pasar de pelar patatas en el cuerpo de guardia del cuartel de Grob Sakrije, hasta que estalló la Guerra de la Antigua Yugoslavia y se soliviantó. Sus arengas populares le auparon rápidamente a la fama, con frases célebres como "Ecdibus Guiere", "Die Slegen kaine Karavaina", "Kajectka et Politus" y la famosa "Sleva die maia Slevah" (su lema familiar), todo un revulsivo para la población aborigen de la época.
De pelar tubérculos a dirigir un ejército se pasó en un suspiro. Svoskias defendió a capa y espada la población de Junacka sin conseguirlo, pero su fama ya era mundial.
Del concepto del general Svoskias han surgido a posteriori numerosas iniciativas. El título del cortometraje "Path Rea Potested" , tiene relación con este movimiento. Así mismo, las marcas "Zrolor", "La caña de España" o "Qué duda cabe" entronizan con esta idea añadiéndole el subjetivismo de Pedro Martín-Barrajón y sus secuaces de la Escuela de Las Rozas.
El mundo de la cultura ha rendido varios e importantes homenajes al ideario svoskil sin saberlo. Sirvan de ejemplo canciones como "Shout" de Otis Day & The Knights, o películas como Animal House .
Otro de los hitos audiovisuales que guardan relación con el "svoskiosismo" es el mundo de los cortometrajes. Su máximo exponente es, sin duda, el afamado El secdleto de la tlompeta , de Javier Fesser . Esta cinta, exhibida en innumerables ocasiones en varias reuniones nocturnas, no es sino el bautismo de fuego para todos aquellos que desean conocer más a fondo las veleidades del mundo del general Svoskias. |